🌒 Abril en La Cuarta Pared: Cuatro películas, muchas vidas
- itstimetothink20
- 5 may
- 2 Min. de lectura

Abril ha sido un mes de contrastes, emociones intensas y muchas preguntas abiertas. En La Cuarta Pared buscamos películas que no solo se vean, sino que se sientan. Este mes nos llevó del misterio íntimo al sacrificio extremo, de la fantasía nostálgica a la desolación de un mundo que se apaga. Cuatro historias, cuatro viajes que nos recuerdan por qué el cine es uno de los mejores espejos para el alma.
🎥 Estocolmo (2013)Una joya del cine independiente español que juega con nuestras expectativas y habla del amor, la atracción y la fragilidad de las conexiones humanas. Rodada casi en su totalidad en una sola noche madrileña, esta película crea un ambiente tan íntimo como inquietante. Su director, Rodrigo Sorogoyen, sería años más tarde uno de los grandes nombres del cine español, y aquí ya dejaba claro su talento para el ritmo, los silencios… y las emociones incómodas.
🎥 La Pasión de Cristo (2004)Una película que no deja indiferente a nadie. Dirigida por Mel Gibson y hablada en arameo, latín y hebreo, es probablemente una de las representaciones más crudas de los últimos días de Jesús. Más allá del debate teológico o religioso, es un ejercicio cinematográfico radical sobre el dolor, la redención y el sacrificio llevado al límite. Una obra intensa, física, que nos confronta con lo extremo.
🎥 Big Fish (2003)Un bálsamo entre tanta intensidad. La fantasía, el amor y la reconciliación entre padre e hijo se mezclan en este cuento visual de Tim Burton. Una película que habla de cómo las historias que contamos pueden ser más reales que los hechos, y de cómo el recuerdo —cuando está lleno de amor— puede ser el mejor lugar donde habitar. ¿Realidad o fantasía? ¿Qué más da si nos hace mejores?
🎥 The Road (2009)Y cerramos con oscuridad… y ternura. Un padre y su hijo sobreviven en un mundo devastado. Pero más allá del apocalipsis, The Road nos plantea una pregunta incómoda: ¿qué queda de nosotros cuando no queda nada? Adaptación de la novela de Cormac McCarthy, esta película no ofrece respuestas fáciles, pero sí deja huellas profundas. Porque a veces, seguir caminando ya es un acto de fe.
Cada una de estas películas nos invitó a mirar la vida con otros ojos. Algunas nos descolocaron, otras nos hicieron llorar, otras nos dieron paz. Lo importante es que nos movieron.
En abril seguimos explorando caminos. ¿Te vienes?
✨ La Cuarta Pared — Donde el cine no termina en los créditos.










